Estudié una carrera universitaria, busqué trabajo fijo, compré una casa y formé una familia.

Algo no cuadraba, cuando conseguí todo más vacío sentía, me encontraba trabajando en dos empleos, con una hipoteca y una gran incapacidad para apostar por mi familia. 

En esta desesperación pensé que trabajar aún más, podría esquivar mi sentimiento de culpa, soledad y desesperación. Toda mi brillante estrategia me llevó a agotarme de tal manera que me sentía una victima del sistema, echando la culpa a todas las personas de mi alrededor, esclavizado al trabajo y atentando contra la familia que había creado. 

Físicamente empezaba a tener ansiedad y problemas de sueño. Sentía que podía con todo hasta que me separé y vi como mi hijo se alejaba de mí, ya no podría estar con él como deseaba, no podría compartir las rutinas que habíamos establecido. Me tendría que resignar a un convenio regulador que dictara los pasos a dar como padre. Este acontecimiento me hizo tocar fondo, no resistía esa distancia impuesta. 

Pedí ayuda desesperado a un terapeuta y estuve dispuesto a rediseñar mi vida. Me prometí a mi mismo que este acto dramático me impulsaría hasta conocer mi esencia, hasta conseguir respuestas y descubrir el sentido de mi vida.

Me adentré en una perspectiva diferente a como conocía hasta ahora, por ello invertí tiempo y dinero en formaciones como “Biodesprogramación Biológica”. Este paso, me supuso un antes y un después, pues comecé una etapa de autoconocimiento muy importante. Mi transformación laboral y personal empezaba a tener sentido y decidí poner todo “patas arriba”. Una crisis es un buen momento para ser creativo y mostrar todos los recursos personales que tienes.

El rediseño es un proceso muy poderoso que requiere valentía, disciplina y determinación, ya que quien entra en el proceso debe estar dispuesto a hacer una mirada integral de sus valores, sus talentos, sus habilidades, su visión profesional, su propósito personal de vida, sus relaciones sociales y por supuesto, las brechas que lo separan del estilo de vida deseado.

Hoy en día me atrevo a decir que sino hubiera conocido mis limites personales y laborales no podría hablar de:

1. Ser un padre consciente
2. Determinar mis limites
3. No mendigar amor a mi alrededor.
4. Respetarme en cada decisión.
5. Estar enamorado de mi pareja.
6. Proyectar mi profesión a mi manera y vivir de ello.

No es un curso que te descargues contenido. Estamos hablando de seis meses de acompañamiento online y presencial que transformará tu vida.

Te voy acompañar desde el principio hasta la última sesión que tengamos.

Vamos hacerlo de una manera sencilla paso a paso para que puedas entender tu vida y vayas comprendiendo tus raíces.

Estudiaremos la profundidad de tu esencia, haciendo florecer tu valor humano.

Centramos el objetivo en trabajar sobre las emociones que estás sintiendo.

No existe receta externa a tí, por eso necesitamos hacernos nuevas preguntas y mirar en sitios  donde nunca hemos mirado.

Vamos a potenciar el tener fé en ti mismo y en tus posibilidades.

Vamos a indagar las creencias que limitan tus pasos.

Vamos a trabajar el inconsciente personal y familiar. Como resultado impactaremos el inconsciente del entorno inmediato.

Te cuesta tomar decisiones en tu vida y eso te frustra, sientes que necesitas el apoyo de un profesional para ello.

Te comprometes sin excusas contigo mism@.

Llevas tiempo estancad@ en algún ámbito de tu vida: sea personal o profesional.

Vas a indagar en tu condicionamiento familiar.

Te sientes perdid@ y estás buscando respuestas a tu vida.

Deseas descubrir tu potencial ilimitado para materializar tus sueños y metas en el día a día.

Te falta motivación para mejorar tu vida en pareja, tus relaciones y tu propio desarrollo personal.